Hasta un 30 por ciento de todos los tipos de tumores malignos se pueden evitar
En la lucha contra el cáncer -por el cual 222 mexicanos mueren cada día- se realizará el Cancerotón para recaudar fondos
BUAP. 9 de agosto de 2017.-En respuesta al incremento de la estadística de cáncer en los últimos años en el país -222 mexicanos fallecen cada día por esta causa-, se estableció en la BUAP la Clínica de Prevención y Detección Oportuna de Cáncer, donde se busca promover una cultura de prevención, a través de la reducción de factores de riesgo, pues se estima que hasta un 30 por ciento de todos los tipos de esa patología se pueden prevenir.
De acuerdo con el responsable de la Unidad de Oncología del Hospital Universitario, José Luis Gutiérrez Herrera, la lucha contra el cáncer debe darse a través de educar en salud, y aquí la cultura de la prevención desempeña un rol importante. Ejemplo de ello es la disminución de la incidencia del cáncer cérvico uterino en ese nosocomio, donde de dos a tres cirugías diarias que se realizaban en el 2000, pasó a una cada tres meses en este año, como resultado de campañas de salud.
Alejandro Godínez Carrillo, responsable de la Clínica de Prevención y Detección Oportuna de Cáncer del HUP -coordinada con el Instituto Nacional de Cancerología y su patronato-, indicó que la labor de esta es proporcionar una atención integral y de diagnóstico oportuno, por lo que los especialistas evaluarán aspectos como mala alimentación, tabaquismo, alcoholismo, sobrepeso u obesidad, estilo de vida, edad, prácticas de ejercicio, exposición al sol sin protección, infecciones y enfermedades hereditarias, entre otros.
El modelo instaurado es una consulta de primer contacto con un oncólogo quirúrgico, quien hará una historia clínica encaminada a determinar factores de riesgo, además de realizar exploración física. De acuerdo con los resultados, se establecerá un plan de acción y el paciente será canalizado a otros servicios médicos para su correcta atención, como nutrición, psicología y valoración por genética.
Otros servicios de apoyo serán la clínica de displasias, endoscopía, ginecología, neumología, trabajo social y enfermería. Con ello, se evitará el avance del cáncer y que su tratamiento sea más sencillo, afirmó Godínez Carrillo.
La edad y el género también influyen en el desarrollo de ciertos tipos de cáncer. Por ello, a partir de los 20 años las mujeres -que ya tuvieron su primera relación sexual- deben realizarse estudios de Papanicolaou, mayores de 40 de mastografía y después de los 50 análisis de detección oculta de sangre en heces. En el caso de los hombres, a partir de los 40 años una revisión de próstata y después de los 50 análisis de detección oculta de sangre en heces.
En el cuarto piso de la Torre Médica del Hospital Universitario de Puebla, la Clínica de Prevención y Detección Oportuna de Cáncer brinda, en una primera etapa, servicios a derechohabientes de este nosocomio.
Este modelo de atención médica se enfoca a los tumores más frecuentes a nivel mundial: mama, colon y recto, cérvix, próstata y pulmón, de los cuales se tiene un protocolo de diagnóstico definido, por lo que su detección oportuna permitirá un control adecuado del padecimiento y permitirá proporcionar una mejor calidad de vida al paciente.
Cancerotón 2017
La colecta de fondos del Cancerotón, tanto en la capital poblana como al interior del estado, inició este 7 de agosto. Se espera recaudar más de 30 millones de pesos con aportaciones y donativos de patrocinadores, empresas, gobierno y sociedad, cifra que será destinada al equipamiento de la Clínica de Prevención y Detección Oportuna de Cáncer, como reactivos y equipo de laboratorio, la compra de un mastógrafo, entre otros insumos, la realización de estudios moleculares y contratación de personal, para también brindar servicio a población abierta.
El próximo 18 de agosto se llevarán a cabo transmisiones en televisión de las recaudaciones. Durante este tiempo estará activa la cuenta bancaria para donaciones y se darán a conocer algunos testimoniales.
En la colecta participarán alrededor de 300 colaboradores, en su mayoría estudiantes del Área de la Salud de la BUAP, quienes recibieron una capacitación previa acerca de esta enfermedad, con la finalidad de proporcionar a la población información de la misma. De igual manera, las alcancías están ubicadas en todas las sucursales de Farmacias Fleming.
Los genes determinan el 10 por ciento de padecimiento de cáncer
El 90 por ciento de las probabilidades de padecer cáncer se asocia a aspectos multifactoriales, como estilo de vida, edad, género y factores ambientales, entre otros. El 10 por ciento restante es determinado por la carga genética; es decir, alguno de los padres transmitió un error en un gen con relación a los sistemas de defensa contra el cáncer o durante el desarrollo embrionario se propició esta anomalía.
“Si se considera que de una persona se puede ampliar al resto de la familia, el riesgo también va aunado a ella. De ahí la importancia de su identificación”, aseguró Aurea Vera Loaiza, genetista de la Clínica de Prevención y Detección Oportuna de Cáncer, con sede en la BUAP.
Por ello, los pacientes con al menos un familiar cercano -papás, hermanos e hijos- que han tenido cáncer deben tener una vigilancia estrecha. Asimismo, la atención en la prevención y detección oportuna del mismo debe extenderse al resto de la familia de primer grado; además de tíos, primos y sobrinos para realizar un asesoramiento genético y explicar un riesgo aumentado de esta enfermedad. “Lo anterior es importante porque ya no se trata de una persona, sino del resto de la familia”.
La especialista informó que la atención inicia con el desarrollo de un árbol genealógico basado en antecedentes personales y familiares, recabando información sobre este padecimiento hereditario en cuanto a su tipo, diagnóstico y tratamiento. Existen ciertos focos rojos: un familiar joven con este mal, lo tuvo en distintos órganos, varios tumores en el mismo órgano o es un tipo raro de cáncer.
Para confirmar el cáncer hereditario se realizan estudios moleculares, a través de la toma de muestra de sangre del paciente, para así extraer DNA y analizar las unidades funcionales -genes- asociados al desarrollo de cáncer. Este tipo de estudios genéticos son costosos y poco accesibles, por lo que un porcentaje de los fondos recaudados del Cancerotón se destinarán a este fin.
Cuando no existen posibilidades de efectuar este tipo de estudios, Vera Loaiza explicó que el paciente ingresa a un programa de vigilancia estrecha con la realización de ciertos estudios de gabinete frecuentes, como mastografía, endoscopía, revisiones de la piel, Papanicolaou y colonoscopía. Se trata de un programa de tamizaje estricto, para que en caso de detectar cáncer en etapas tempranas se atienda oportunamente.
Tras insistir en que la detección oportuna es la cura de los tumores malignos, Gutiérrez Herrera afirmó que el cáncer es un problema de salud pública, pues la esperanza de vida ha aumentado y es la patología número uno entre los adultos mayores. Asimismo, nuestro país ocupa el primer lugar en obesidad y es este el principal factor de riesgo en cáncer de mama y próstata, los de mayores incidencia en mujeres y hombres, respectivamente.