La BUAP trabaja a favor de la preservación del patrimonio biocultural de México

Grupo de investigación del ICUAP forma parte de la Red Temática sobre el Patrimonio Biocultural de Conacyt

Martes, Diciembre 12, 2017. Ante la necesidad de fortalecer el tema del patrimonio biocultural en la agenda política nacional, diversas instituciones del país, entre estas la BUAP, unieron esfuerzos para generar estrategias que aseguren su conservación, protección, promoción e innovación.

El grupo de investigación Biodiversidad, Alimentación y Cambio Climático del Instituto de Ciencias de la BUAP (ICUAP), es uno de los 28 nodos académicos del país que conforman la Red Temática sobre el Patrimonio Biocultural de Conacyt.

“El patrimonio biocultural puede ser entendido como el conjunto de conocimientos y habilidades de los pueblos originarios, con relación a sus ecosistemas. Y es producto de un proceso histórico de aprendizaje permanente”, explicó Benjamín Ortiz Espejel, profesor becario del Instituto de Ciencias de la BUAP (ICUAP).  

Más allá de una curiosidad antropológica, es importante entender y difundir todo lo que engloba este concepto, ya que contiene una sabiduría ancestral que podría proporcionar conocimientos ante riesgos como el cambio climático, el uso de la biodiversidad y la agrodiversidad.    

Por ello, y como parte de las acciones enfocadas a su estudio y preservación, la BUAP fue sede del “Foro por la Defensa del Patrimonio Biocultural de México”, organizado por la Red Temática sobre el Patrimonio Biocultural de Conacyt, en el cual se reunieron expertos de todo el país para reflexionar temas como la defensa de los territorios de los pueblos originarios, la comunalidad como fundamento de lo biocultural, modelos para la defensa y fomento de lo biocultural, entre otros.

Ortiz Espejel dio a conocer que a través del grupo de investigación Biodiversidad, Alimentación y Cambio Climático del ICUAP, del cual forma parte,  en la Máxcima Casa de Estudios en Puebla se desarrollan proyectos con comunidades campesinas e indígenas del estado, enfocados en este tema.

“En la comunidad de San Bernardino Tepenene, en el municipio de Tzicatlacoyan, se han realizado obras de captación de agua de lluvia para uso casero, se ha promovido la agricultura en invernadero y aprovechamiento de residuos orgánicos, como abono, y los resultados de estos proyectos han sido publicados en revistas y libros especializados en el área”, señaló.

Además, recientemente el grupo de investigación estableció contacto con campesinos de la localidad de San Martín Tlamapa, en el municipio de Santa Isabel Cholula, para trabajar los rubros de agricultura orgánica y reconstrucción del tejido social.

En la opinión del académico, a través de los trabajos efectuados por cada uno de los nodos, será posible generar las estrategias que permitan enfrentar las posibles amenazas al patrimonio biocultural, sean estas de origen natural, social, económico y político, como por ejemplo las empresas trasnacionales de semillas transferidas, el proceso de urbanización, la expansión de minas y la deforestación, entre otras.